Hoy, Pilar y yo, hemos calentado motores por caminos varios. A primera hora hemos caminado por un bosque de hayas muy bonito, hemos cruzado ríos y disfrutado de un paisaje auténtico. Nos ha acompañado un día veraniego espléndido para caminar, por la sombra, eso sí.
Después del paseo por el bosque hemos recorrido un trozo del Camino de Santiago, concretamente el trozo que va desde Roncesvalles a Burguete. En Burguete están celebrando las fiestas patronales de San Juan y se vive un ambiente muy jovial. Hemos conversado con unos peregrinos navarros jubilados que venían desde Roma caminando, 40 días y 1500 Km, una experiencia oírles contar sus aventuras.
Después de Burguete, hemos retrocedido de nuevo a Roncesvalles, aquí nos esperaba una suculenta y abundante comida en la Fonda de Roncesvalles, la comida la hemos acompañado de un tinto Navarro, Gran Feudo Crianza del 2004.
Para bajar la comida, hemos realizado una visita general a los monumentos de Roncesvalles, el claustro, el museo, el Silo de Carlomagno, que hoy sirve como cementerio de los habitantes de Roncesvalles y por último una pequeña iglesia dedicada a Santiago.
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